Una fragancia intensa y rica que reúne a los exploradores globales, aquellos profundamente conectados con la energía de la tierra pero atraídos por los elementos místicos del cosmos. Viven y aman en todo el mundo, en busca de nuevas experiencias y conciencias. Primero atraídos por las profundidades aromáticas y arremolinadas del pachulí, el cuero, la corteza de canela y el sándalo australiano. Después, cautivados por el suave y cálido resplandor aromático de la rosa, el jazmín, el osmanto y el lirio marroquí. Un oro fragante que evoca lo antiguo, pero resuena con lo nuevo, un señuelo sensorial para toda la humanidad.